sábado, 25 de agosto de 2012

Albert Einstein, además de la teoría de la relatividad, nos dejó estos excelentes consejos para la vida y los negocios

Albert Einstein
Albert Einstein es quizás el científico más influyente que haya existido hasta ahora por su inmejorable aporte a la ciencia sobre todo en el campo de la física. Este personaje, considerado como un genio, nos ha dado una lección de vida que todos debemos seguir para conseguir lo que queramos, no sólo con sus conocimientos sobre ciencia que ayudan a otros científicos a descubrir leyes que determinan el funcionamiento del universo, sino con su simple forma de vivir, esa que le permitió encontrar las respuestas a aquellos problemas supuestamente sin solución.


Pero este genial científico a lo largo de su vida ha sido el gestor de frases que contienen un gran valor para toda persona que las tome en serio, teniendo en cuenta que vienen de un estudioso que las tomó para sí con el objetivo de lograr todo lo que consiguió de manera superlativa.
Estas recomendaciones, consejos o lecciones las podemos aplicar para nuestra vida, para los negocios y para cualquier situación que se presente relacionada a la obtención de nuestras metas, y aquí se las dejamos para que las hagan suyas:
1. Sigue tu curiosidad
“No tengo ningún talento especial. Yo sólo soy apasionadamente curioso”.
2. La perseverancia no tiene precio
“No es que yo soy tan inteligente, es sólo que me quedo más tiempo con los problemas”.
3. Concéntrese en el presente
“Cualquier hombre que puede conducir de forma segura mientras besa a una chica guapa no está simplemente dando al beso la atención que se merece.”
4. La imaginación es poderosa
“La imaginación lo es todo. Es la vista previa de las próximas atracciones de la vida. La imaginación es más importante que el conocimiento”.
5. Cometer errores
“Una persona que nunca ha cometido un error nunca intentó nada nuevo.”
6. Vivir el momento
“Nunca pienso en el futuro, pues este llega lo suficientemente pronto.”
7. Crear Valor
“Intenta no volverte un hombre de éxito, sino volverte un hombre de valor.”
8. No ser repetitivo
“Locura: hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes”.
9. El conocimiento proviene de la experiencia
“La información no es conocimiento. La única fuente de conocimiento es la experiencia.”
10. Aprenda las reglas y luego jugar lo mejor que pueda
“Tienes que aprender las reglas del juego. Y luego tienes que jugar mejor que nadie.”

viernes, 24 de agosto de 2012

Khan Academy: Un nuevo universo de posibilidades

por Blanca Heredia
 
Sal Khan, bengalí-indio-americano de 35 años, empezó a cambiar el mundo hace 8 años desde la sala de su casa. Su primita Nadia tenía problemas en la escuela con matemáticas. Sal decidió darle clases a distancia por las noches, al terminar su jornada de trabajo como analista financiero. Su éxito con Nadia llevó a otros primitos a pedirle a Sal que los apoyara. Para ahorrar tiempo, Sal comenzó a grabar y a subir a YouTube una serie de videos cortos muy sencillos (voz en off, esquemas y números en un pizarrón) en los que explicaba conceptos fundamentales de matemáticas.
Sal le fue agregando otros componentes a sus tutorías: un programa para generar problemas matemáticos que, de forma automática y personalizada, iba elevando sus niveles de complejidad, y un sistema para registrar, entre otros, cuántas veces miraba un alumno cada video, cuánto tiempo le tomaba resolver problemas de un cierto tipo y dónde se atoraba cada quien.
Se corrió la voz. Los videos de Sal en YouTube atrajeron a muchos otros alumnos para quienes la forma convencional de enseñar matemáticas en sus escuelas resultaba frustrante, desalentadora e ineficaz. La ola fue creciendo y en 2006, dos años después de haber comenzado a tutorear a Nadia, Sal funda Khan Academy. Esa institución, sin fines de lucro y con un fuerte apoyo de la Fundación Gates, es hoy la escuela virtual, de acceso libre y gratuito, más grande del mundo.
¿Quieres aprender a sumar? ¿Quieres entender la primera ley de Newton? ¿No tomaste cálculo y te urge aprenderlo? Ve a www.khanacademy.org y aprende lo que necesites a tu propio paso. Gracias a Sal Khan, todo aquel (desde una niña de primaria hasta un adulto mayor) que sepa inglés y tenga acceso a una computadora con Internet, puede obtener contenidos educativos de primera, presentados de forma simple y amena. Por el momento, Khan Academy ofrece contenidos educativos de altísima calidad, fundamentalmente en matemáticas, ciencias, economía y finanzas, pero ya está trabajando en expandir las áreas de conocimiento incluidas y el número de idiomas en los que se distribuyen.
Khan Academy constituye un atisbo del futuro posible para todo lo relacionado con el mundo de enseñar y aprender. En ese universo, muchas de las restricciones centrales de la educación tradicional dejan de serlo. Por ejemplo, la escasez de docentes excelentes, deja de ser un problema; el costo gigante de personalizar el proceso educativo a fin de que responda a los perfiles de aprendizaje de cada alumno, cae de forma vertical. El mundo de Khan vuelve lo escaso abundante, pero obliga también a repensar roles, rutinas e ideas que durante siglos hemos pensado inamovibles. En este mundo posible en el que todos podemos aprender accediendo gratuitamente o a un costo mínimo y a nuestro ritmo a los mejores contenidos y maestros imaginables, los maestros “presenciales” no pierden su valor, simplemente tienen que hacer otras cosas, tales como: enseñar a sus alumnos a aprender por sí mismos e impulsarlos a rebasar sus propias fronteras.
¿Qué tendríamos que estar pensando y haciendo en México para aprovechar, a favor de una educación de calidad para todos, este nuevo universo de oportunidades y posibilidades?
bherediar@yahoo.com
Visto aquí

jueves, 16 de agosto de 2012

Peter Senge, hablando se entiende la gente (y también aprende)


¿Cómo construir una empresa inteligente con alta capacidad de aprendizaje? Pregúntele a Peter Senge. Su obra revolucionó nuestra forma de pensar las organizaciones...

Por Eduardo PressNacido en 1947 en la ciudad de Stanford, Peter Senge se graduó en ingeniería en la Universidad de Stanford para pasar luego al MIT, donde fue director del Centro de Aprendizaje Organizacional de la Sloan School of Management y fundador de la Society for Organizational Learning.

Senge se volvió inmensamente popular gracias a una obra revolucionaria que la Harvard Business Review eligió, en 1997, como uno de los textos más influyentes de las últimas dos décadas: La Quinta Disciplina (1990).

En este libro no se encuentran las diez recetas para ser un buen ejecutivo. Por el contrario, ofrece una nueva manera (y un nuevo lenguaje) para pensar las organizaciones.

Antes, las organizaciones se pensaban como máquinas compuestas por partes que se podían aislar unas de otras. Los fenómenos se estudiaban en forma aislada y parcial. Senge introdujo los conceptos de "pensamiento sistémico", "organización inteligente" y "organización abierta al aprendizaje".

El pensamiento sistémico nos permite pensar en totalidades y hacer conexiones entre sucesos separados en el tiempo. Así, ampliamos el campo de observación para comprender fenómenos que, de otra manera, resultarían inexplicables.

Para Senge, la conversación es la clave del aprendizaje organizacional. Promoviendo espacios de conversación sobre diversos temas desde una perspectiva sistémica puede difundirse una visión compartida fundamental para el trabajo en equipo.

Según Senge, las empresas que no se toman en serio el aprendizaje organizacional corren serios riesgos de desaparecer. De hecho, esto ha ocurrido con muchas compañías exitosas de otros tiempos (incluso alcanzando los primeros puestos del ranking Fortune 500) pero que hoy ya no existen.

Para mantener buena salud a medida que pasan los años los directivos de las empresas deben integrar su función productora de dinero con una visión alternativa: la organización como una comunidad humana, como un fenómeno viviente que se adapta a medida que se van presentando los cambios, logrando así sostener su rentabilidad a lo largo del tiempo.

En los últimos años, las ideas de Senge se han distinguido por un profundo contenido humano y ecológico. Las empresas, auténticas organizaciones vivientes, son sistemas emotivos y orgánicos en constante evolución. Entonces, es recomendable prestar atención a las personas que la conforman, a sus motivaciones y a las interacciones entre ellas.

En sus conferencias y entrevistas actuales, Senge llama permanentemente la atención sobre una serie de temas a ser tenidos en cuenta por los líderes corporativos:

1) La división social

Según Senge, la brecha social que separa cada vez más a las personas tendrá un impacto catastrófico en el mundo de los negocios. Los líderes pueden ayudar a reducir la grieta social confiando en el talento de la gente, siendo inclusivos y tolerantes hacia la diversidad.

2) El desperdicio ecológico


Los líderes del mundo siguen explotando y depositando los restos del crecimiento económico en el planeta. Aún no se toma plena conciencia de que más del 90% de nuestros desechos no son reciclables. La empresa debe buscar un crecimiento responsable (de hecho, muchas ya lo están haciendo).

3) La falta de oportunidades de realización humana en el trabajo

Según Senge, a pesar de los progresos realizados, las estructuras sociales siguen privilegiando una cultura del liderazgo autoritario.

Uno de mis rasgos preferidos del pensamiento de Senge es su incansable búsqueda en nuevas aguas. Es muy difícil encontrar repeticiones esquemáticas en sus escritos o conferencias. Esa es su riqueza.

Una de sus frases que más me gustan (y que sigue tan vigente como siempre) se refiere al lugar que le adjudica a la gente en su relación con la realidad: "En vez de mirar a las personas como seres que se limitan a reaccionar sin alternativas, las miramos como partícipes activos en el modelado de la realidad".

martes, 14 de agosto de 2012

El aula del futuro: nuevos paradigmas educativos


Investigadores de la UNAM desarrollan un proyecto educativo que busca modernizar y hacer más flexibles los espacios de aprendizaje, donde la tecnología sea diseñada e integrada de manera específica a un modelo educativo social determinado

Un proyecto educativo que busca modernizar y hacer más flexibles los espacios de aprendizaje. (Foto: DGDC )
Redacción | El UniversalMartes 14 de agosto de 2012 01:32

La introducción de los recursos computacionales a las aulas no representa una mejoría sustancial, en tanto el modelo de enseñanza que se siga ejerciendo allí sea individualizado y unidireccional, afirmó Fernando Gamboa Rodríguez, secretario de Innovación Educativa de la Coordinación de Universidad Abierta y Educación a Distancia de la UNAM (CUAED), quien desde 2007 encabeza a un equipo de expertos que desarrollan el proyecto Aula del Futuro.
"Nos preguntamos, ¿cómo hacemos que todos los miembros de un equipo puedan, al mismo tiempo, intervenir y manipular el trabajo? ¿cómo generamos tecnología que, además, promueva las discusiones y permita que los involucrados se expresen e intervengan? Eso es lo que hemos buscado: espacios colaborativos eficientes mediados por tecnología", destacó el también investigador del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico de esta casa de estudios.
En la búsqueda de romper el paradigma de las aulascreadas para que los alumnos trabajen de forma individual, mientras que escuchan las instrucciones del profesor, participa un equipo interdisciplinario de académicos universitarios, principalmente pedagogos, maestros y especialistas en tecnología.
"El Aula del Futuro, contrario a lo que se pueda suponer, no es un proyecto tecnológico; es un proyecto educativo que busca modernizar y hacer más flexibles los espacios de aprendizaje, donde la tecnología sea diseñada e integrada de manera específica a un modelo educativo social buscado", explicó.
Tecnologías para la socialización
Gamboa Rodríguez detalló que su grupo de trabajo ha desarrollado tres tecnologías: un escritorio colaborativo, que funciona con técnicas de realidad aumentada; una superficie interactiva que funciona con técnicas de ‘toque-múltiple' o multitouch, y una pantalla de visualización estereoscópica interactiva, con lentes 3D, como los que se utilizan en el cine.

Precisó que el escritorio colaborativo permite a cuatro alumnos compartir información digital y resolver problemas que son proyectados en el escritorio. Para compartir información, el alumno la arrastra desde su computadora y, al llegar al final de su pantalla, dicha información desaparece de su computadora y aparece en el escritorio.
La información en el escritorio es pública, lo que significa que los demás participantes pueden modificarla. Otra característica es que los alumnos pueden conectarse desde cualquier lugar, así que no es necesario estar físicamente en el aula para poder participar con los compañeros, explicó el investigador.
Por su parte, la superficie interactiva es una mesa que, al tocarla, reacciona al toque de las manos. La tecnología permite que haya múltiples usuarios manipulando la información que se proyecta, lo que permite crear sistemas para que varios alumnos elaboren de manera coordinada reportes, o aprendan matemáticas.
La proyección 3D, agregó, permite a los alumnos observar y manipular objetos como si estos estuvieran físicamente dentro del aula.
Las dos primeras tecnologías ya salieron del laboratorio con aplicaciones para la educación. Fueron adquiridas por la Universidad Autónoma de Nuevo León, el Centro de Alta Tecnología para Educación a Distancia de la UNAM (CATED) en Tlaxcala, y por algunos museos. Finalmente, hay una versión de la superficie interactiva que próximamente se probará en los laboratorios de ciencias del bachillerato de la Universidad Nacional, reveló Gamboa.
El futuro del Aula del Futuro
En el Aula del Futuro, es fundamental utilizar tecnología aún en investigación, para que siga a la vanguardia. "Se llama Aula del Futuro porque precisamente, en sentido estricto, los usuarios nunca vamos a llegar a ella; es un proyecto aspiracional. De allí su nombre, siempre buscaremos estar adelantados", subrayó Fernando Gamboa.
Apunto que esto implica también responsabilidad, pues deben seleccionar de manera cuidadosa aquella tecnología que tenga posibilidades de madurar y llegar a la sociedad, para que este trabajo tenga su máximo impacto. Por ejemplo, las tecnologías que incluimos hace cinco años en nuestro proyecto, apenas hoy comienzan a salir al público en general, y nosotros estamos listos para hacer propuestas educativas con ellas, dijo.
Las instalaciones del aula también han evolucionado. El proyecto cuenta con un nuevo espacio donde los investigadores podrán ampliar su campo de estudio. En el nuevo recinto cabrán veinte alumnos y un asesor: "Ahora sí podremos hacer estudios más cercanos a lo que ocurre en un aula, con un grupo completo y no sólo un equipo, como hasta ahora", explicó Gamboa Rodríguez.
El objetivo es inaugurar el nuevo espacio este año y así obtener más estudios y resultados sobre las experiencias con el trabajo colaborativo, que permitan a los investigadores desarrollar nuevas aplicaciones tecnológicas con orientación educativa.
Para obtener más información acerca del aula del futuro, visita http://www.facebook.com/elauladelfuturo/

Dirección General de Divulgación de la Ciencia, UNAM